SISTEMA NERVIOSO CENTRAL
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Nuevos avances y retos persistentes en la neuropsiquiatría de la enfermedad de Parkinson

Nuevos avances y retos persistentes en la neuropsiquiatría de la enfermedad de Parkinson

Los síntomas neuropsiquiátricos en pacientes con la enfermedad de Parkinson son tan importantes como los síntomas motores.1 Encuentre aquí toda la información de  los avances y nuevos desafíos a los que se enfrenta este campo.  

1. Síntomas neuropsiquiátricos en la enfermedad de Parkinson  

La enfermedad de Parkinson (EP) suele estar acompañada de síntomas neuropsiquiátricos, los cuales permiten catalogar esta condición no solo como una enfermedad motora, sino también como un trastorno neuropsiquiátrico. Dentro de  os signos neuropsiquiátricos se encuentran la depresión, la ansiedad, la psicosis, la apatía y los trastornos en el control de los impulsos. Dichos síntomas se pueden presentar antes de los síntomas motores, durante el desarrollo de estos o incluso en etapas avanzadas.1,2

- Depresión 

La depresión es uno de los síntomas neuropsiquiátricos más frecuentes. Comúnmente, este signo se presenta al inicio de la enfermedad y su  prevalencia incrementa a lo largo de su desarrollo.1 Aunque este trastorno también se evidencia en la población general y, que comparte manifestaciones similares, la depresión en pacientes con EP se diferencia en  factores clínicos, como la pérdida de energía, la anhedonia, cambios en el apetito y el sueño, entre otros.3 

- Ansiedad

La ansiedad es el segundo síntoma neuropsiquiátrico más común. En pacientes con EP puede presentarse como un síntoma aislado o concomitante con otros signos, como la depresión. La mayoría de las  veces, la ansiedad en la EP se puede presentar como trastorno de ansiedad  generalizada y fobia social; no obstante, el paciente es propenso a sufrir cualquier tipo de trastorno de ansiedad. Algunos estudios revelan que la  ansiedad no está asociada a las dificultades psicológicas y sociales que conlleva la adaptación de la enfermedad, sino con un proceso cerebral que se  produce durante la EP.1,3 

- Psicosis  

La psicosis relacionada con la EP se caracteriza por manifestaciones como alucinaciones visuales, auditivas, de sensación de presencia, delirios e  ilusiones. Este síndrome puede presentarse hasta en un 40% de los pacientes y la frecuencia progresa a medida que avanza la enfermedad. El  impacto de la psicosis se asocia con una disminución en la calidad de vida del paciente, una gran probabilidad de hospitalización y un aumento de la mortalidad.1.3 

- Apatía  

La apatía se asocia con aspectos emocionales, motivacionales, cognitivos y  conductuales del paciente, y se caracteriza por la disminución del interés por las actividades cotidianas, indiferencia, poca demostración de afecto y  dificultad para llevar a cabo una actividad hasta su finalización. La frecuencia  de este síndrome en pacientes con EP es de aproximadamente un 42%.4 

- Trastornos del control de los impulsos 

Este trastorno consiste en la incapacidad de resistencia ante un impulso o  tentación por practicar una acción perjudicial para el paciente o para las  personas de su entorno, ya sea de orden físico, psicológico, social o legal.  Algunos factores de riesgo para el desarrollo de este trastorno en la EP son  las dosis elevadas de medicamentos dopaminérgicos, los antecedentes  psiquiátricos y el consumo de drogas y alcohol. Se estima que la prevalencia de los trastornos del control de los impulsos es de aproximadamente un 15% en pacientes con tratamiento para la EP, a medida  que avanza la enfermedad.1,4 

2. Avances en la detección de los trastornos neuropsiquiátricos en la EP

Debe dársele más importancia al reconocimiento de los signos neuropsiquiátricos para poder brindar una atención óptima y temprana. Para esto, es importante que los síntomas neuropsiquiátricos en pacientes con EP sean evaluados por un neurólogo aproximadamente de cada 6 a 12 meses, para así también personalizar el tratamiento de acuerdo con sus necesidades.1

Además de una exhaustiva indagación clínica por parte del médico al paciente, se ha desarrollado un gran avance en la salud electrónica implementada en la  práctica clínica, lo cual permite el descubrimiento de nuevos métodos de  evaluación a través de información más veraz y personalizada de cada paciente en  situaciones reales. Asimismo, se han desarrollado avances tecnológicos en teléfonos inteligentes con el objetivo de detectar síntomas motores y  neuropsiquiátricos mediante una recolección de datos emocionales y cognitivos  del paciente.1

3. ¿Cuáles son los progresos en el tratamiento de los síntomas  
neuropsiquiátricos? 

Síntoma 

Tipo de intervención

Tratamiento 

Depresión 

Farmacológica

Antidepresivos: ensayos han demostrado la eficacia de  diversas clases de antidepresivos (inhibidores selectivos  de la recaptación de serotonina, los inhibidores de la  recaptación de serotonina-norepinefrina y los antidepresivos tricíclicos) en pacientes con EP, sin que  estos representen un riesgo en los síntomas motores.1,5

Psicológica 

Terapia cognitivo-conductual: este tipo de terapia  adaptada a la EP, e impartida mediante telemedicina, por  teléfono y videoconferencia, demostró beneficios significativos en la depresión y el cuidado neurológico en los pacientes con la enfermedad.6 

Actividad física: las intervenciones físicas, en especial  el ejercicio aeróbico, pueden reducir significativamente  el impacto de los síntomas depresivos en pacientes  con EP y, a su vez, disminuyen los síntomas motores.7

Ansiedad 

No farmacológica

Yoga: un estudio demostró que la intervención de 8  semanas de yoga de atención plena mejoró significativamente los síntomas de la ansiedad en  pacientes con EP, frente a los ejercicios de estiramiento  y entrenamiento de resistencia.8 

Danza: aparte de la actividad física, se ha demostrado  que otras actividades como la danza puede mejorar  síntomas motores, cognitivos y neuropsiquiátricos,  como la ansiedad y depresión.9

Psicosis

Farmacológica

La introducción de la pimavanserina, un agonista y  antagonista de los receptores de serotonina 2A, para el  tratamiento de la psicosis ha sido uno de los avances  más notables en el campo médico. Incluso se ha recomendado como medicamento de primera línea,  debido a su eficacia y tolerabilidad favorable en la  psicosis en la EP, en comparación con otros fármacos.1

Apatía 

Farmacológica

Existen diversas pruebas que apoyan el uso de  agonistas de la dopamina y de inhibidores de la acetilcolinesterasa, los cuales disminuyen la apatía en  personas con EP y la carga que genera en sus cuidadores.1,10

 

No farmacológica

La apatía en pacientes con EP mejoró significativamente  con intervenciones de actividad física, por ejemplo, con  la marcha nórdica y rutinas de ejercicios programadas.10

Trastornos del control delos impulsos

 

El principal tratamiento para los trastornos del control de  los impulsos continúa siendo la disminución en las  dosis de los agonistas de la dopamina, mientras que,  la eficacia de otros fármacos sigue en revisión clínica.  Asimismo, la terapia cognitivo-conductual se ha estudiado como una opción para el tratamiento de los  trastornos; sin embargo, aunque la terapia ha arrojado  resultados positivos, hacen falta más estudios que lo  confirmen.1,11

Los síntomas o signos neuropsiquiátricos en la EP se asocian con un detrimento en  la calidad de vida del paciente y, a su vez, representan una mayor carga para sus  cuidadores. Así pues, aunque se han desarrollado importantes avances en la  evaluación y el diagnóstico de los síntomas neuropsiquiátricos para un óptimo  manejo clínico, estos signos suelen pasar desapercibidos e, incluso, no son tratados  en los pacientes con EP. Por otro lado, el tratamiento de los síntomas neuropsiquiátricos todavía se encuentra muy limitado y sigue en constante  estudio, ya que han sido pocas las alternativas terapéuticas que resultan eficaces y  bien toleradas.1 

Existen múltiples retos que deben seguir en la mira del campo científico y médico,  como el desarrollo de nuevos tratamientos para los síntomas neuropsiquiátricos, en centros especializados en la neuropsiquiátrica de la EP.  Asimismo, es necesario que se resuelvan muchas prioridades e incógnitas que aún  se mantienen en el campo, como, por ejemplo, estudiar de manera más amplia los síntomas en presentaciones multimórbidas y no únicamente de forma individual;  seguir evaluando el riesgo de mortalidad con la administración de fármacos para  tratar los signos neuropsiquiátricos, e instar al uso de la telemedicina como  herramienta para un mejor acceso al tratamiento especializado.1 

Te interesa conocer más acerca del tratamiento no farmacológico actual para la Enfermedad de Parkinson?, ¿en qué consiste el tratamiento no farmacológico actual para la Enfermedad de Parkinson?, las respuestas a este muchas otras preguntas te las damos en la whitepaper: Intervenciones no farmacológicas en la enfermedad del Parkinson (EP). 

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Referencias

1.  Weintraub D, Aarsland D, Chaudhuri KR, Dobkin RD, Leentjens AF,  
Rodriguez-Violante M et al. The neuropsychiatry of Parkinson's disease:  
advances and challenges. Lancet Neurol. Enero de 2022;21(1):89-102. 
2. Isais Millán S, Piña Fuentes D, Guzmán Astorga C, Cervantes Arriaga A,  Rodríguez Violante M. Prevalencia de trastornos neuropsiquiátricos en  
pacientes con enfermedad de Parkinson (EP) no tratados. Gac Med Mex.  2016;152:357-63.  
3. Khan MA, Quadri SA, Tohid H. A comprehensive overview of the  
neuropsychiatry of Parkinson's disease: A review. Bull Menninger Clin.  
2017;81(1):53-105.
4. Kummer A, Teixeira AL. Neuropsychiatry of Parkinson's disease. Arq  
Neuropsiquiatr. Septiembre de 2009;67(3B):930-9. 
5. Mills KA, Greene MC, Dezube R, Goodson C, Karmarkar T, Pontone GM.  Efficacy and tolerability of antidepressants in Parkinson's disease: A  
systematic review and network meta-analysis. Int J Geriatr Psychiatry. Abril  de 2018;33(4):642-651. 
6. Dobkin RD, Mann SL, Gara MA, Interian A, Rodriguez KM, Menza M.  
Telephone-based cognitive behavioral therapy for depression in Parkinson  disease: A randomized controlled trial. Neurology. 21 de abril de  
2020;94(16):1764-1773. 
7. Wu PL, Lee M, Huang TT. Effectiveness of physical activity on patients  with depression and Parkinson's disease: A systematic review. PLoS One 
[Internet]. 27 de julio de 2017 [citado el 30 de julio de 2022];12(7).  
Disponible en: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC5531507/ 

8. Kwok JYY, Kwan JCY, Auyeung M, Mok VCT, Lau CKY, Choi KC et al. Effects of Mindfulness Yoga vs Stretching and Resistance Training  
Exercises on Anxiety and Depression for People With Parkinson Disease:  A Randomized Clinical Trial. JAMA Neurol. 1 de julio de 2019;76(7):755- 
763. 
9. Estevao C, Fancourt D, Dazzan P, Chaudhuri KR, Sevdalis N, Woods A et  al. Scaling-up Health-Arts Programmes: the largest study in the world  
bringing arts-based mental health interventions into a national health  
service. BJPsych Bull. Febrero de 2021;45(1):32-39. 
10.Mele B, Van S, Holroyd-Leduc J, Ismail Z, Pringsheim T, Goodarzi Z.  
Diagnosis, treatment and management of apathy in Parkinson's disease: a  scoping review. BMJ Open [Internet]. 9 de septiembre de 2020;10(9).  
Disponible en: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC7482451/ 

11.Bhattacharjee S. Impulse control disorders in Parkinson's disease: Review  of pathophysiology, epidemiology, clinical features, management, and  
future challenges. Neurol India. Julio de 2018;66(4):967-975.